Según la versión popular, en 1847, el vástago de la señora Gregory, Hanson, le puso el agujero al donut al clavarlo en uno de los radios del timón de su navío durante una tormenta, ya que necesitaba usar las dos manos. En una entrevista posterior, el marinero explicó que había creado el primer donut “al hundir un pimentero en su centro”, lo que solucionaba el problema de la falta de cocción en ese punto.
Este dulce se popularizó en la Primera Guerra Mundial, cuando mujeres estadounidenses se desplazaron al frente para preparárselo a los soldados de su país, a los que se llamó doughboys. De vuelta a casa quisieron más y así surgió toda una industria.
Seguir a @Culturizando
Tweet