Los investigadores hallaron que la relación entre el dormir y la capacidad de tomar decisiones inteligentes es íntima, por lo que la gente que duerme menos de 7 horas tiene una fuerte tendencia a desarrollar obesidad.
El estudio se realizó con 23 adultos a los cuales se les escaneó la actividad cerebral. La primera vez se les indujo a tener un sueño reparador; en la segunda ocasión, durmieron muy poco. Posteriormente, evaluaron 80 alimentos diferentes.
La primera vez los alimentos sanos tuvieron una gran aceptación; la segunda, alimentos menos saludables con gran contenido de azúcar y grasa fueron vistos como una recompensa. Esto se debe a que el lóbulo frontal del cerebro se reduce después de una mala noche; esta área cerebral es la que regula el juicio, el control de impulsos y la toma de decisiones.
Otros datos muestran que la falta de sueño contribuye a un mayor consumo de calorías y de alimentos ricos en grasa y azúcar y que existan cambios hormonales que aumentan el apetito.
@Culturizando
Fuente: ecoosfera.com
Culturizando no se hace responsable por las afirmaciones y comentarios expresados por sus columnistas, anunciantes o foristas; y no reflejan necesariamente la opinión de la misma.
Culturizando se reserva el derecho a eliminar aquellos comentarios que por su naturaleza sean considerados ofensivos, injuriantes, fuera de la ley o no acordes a la temática tratada.
En ningún momento la publicación de un artículo suministrado por un colaborador, representará algún tipo de relación laboral con Culturizando.
Tweet