Viene de la palabra francesa "sabot" que significa "zueco". De ahí surgió el verbo "saboter" -arrastrar los pies, andar con torpeza-, que por asociación equivalía a hacer algo sin gusto y descuidadamente.
También se dice que en la era industrial los trabajadores calzaban "sabots", que les hacían caminar de forma ineficiente; de allí que la ineficiencia organizada se llame sabotaje
@LaNotaCuriosa
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