1. La pantalla es, de sobra, lo que más energía consume de nuestro teléfono. Por tanto, evitar mirar el móvil a cada minuto sería, para empezar, el mejor consejo. Ajustar el brillo de la pantalla también nos ayudará a un mejor consumo de energía. De la misma forma, es aconsejable reducir el consumo de juegos, ver vídeos o incluso grabarlos, así como realizar fotografías. Todas estas aplicaciones tienen un alto consumo de la batería y, si lo que queremos es que nos dure un poco más, tendremos que reducir el tiempo empleado a estas actividades.
2. Cualquier servicio que permita determinar nuestra ubicación, como el GPS, debe estar desactivado si no se está utilizando en ese momento. Existen muchos servicios que utilizan la localización para obtener información sobre nosotros y, si no lo necesitamos, nos estará limitando sin querer el tiempo de vida de nuestra batería.
3. Optimizar el uso de la batería. Algunos teléfonos incluyen software diseñados específicamente para optimizar el uso de la batería, así que es una opción a aprovechar. Si nuestro modelo de móvil no lo integra, siempre podemos descargarnos una app que realice esa función. Existen muchas para todos los sistemas operativos.
4. Tener activadas las actualizaciones automáticas de nuestras redes sociales preferidas, emails o cualquier otra herramienta, no va a ayudarnos tampoco. Debido a la frecuencia con la que se se reciben actualizaciones, estamos ante un gasto superfluo de la batería. Lo ideal es desactivar esta función y consultar manualmente las aplicaciones cuando convengamos.
5. Siempre que estemos en nuestra casa, en el trabajo, o tengamos disponible una conexión Wi-Fi, es recomendable desconectar el servicio de datos y conectarnos a la wi-fi. Nuestra batería nos lo agradecerá.
6. Cuando estemos conectados a una wi-fi, debemos aprovechar para actualizar nuestro sistema operativo así como las distintas aplicaciones. A pesar de que pueda resultar un poco engorroso, sobre todo la actualización del SO, nuestro teléfono funcionará con más eficiencia, ya que con mucha probabilidad nos incluirá alguna mejora relativa al uso energético de nuestro dispositivo.
7. El calor es un gran enemigo de los dispositivos electrónicos. Evita, en la medida de lo posible, que el teléfono esté expuesto a temperaturas extremas, sobre todo el calor, ya que afecta a la vida útil de la batería.
8. Por último, si aún utilizando estos trucos sigues teniendo la sensación de que tu batería dura muy poco, siempre puedes adquirir una batería externa que te permita utilizar el móvil un poco más de tiempo.
Fuente: Muy Interesante
Seguir a @Culturizando
Tweet