
La tripulación del helicóptero intentó recoger al perro descolgándose, pero el animal huyó hacia otras maderas que flotaban. Una hora después tres rescatistas en una lancha lograron hacerse con el perro, que no llevaba otra identificación que un collar negro.
El perro fue trasladado a un buque de los Guardacostas en el que permaneció tranquilo y comió galletas y salchichas, según han informado los propios Guardacostas y recoge la agencia de noticias Kiodo.
El animal se refugió en el tejado de una casa, que había sido arrastrado unos dos kilómetros mar adentro.
01/04/2011